ADIÓS A LA ALEGRÍA DEL SINTÉTICO

El jogo bonito brasileiro tuvo en Zizinho uno de sus máximos exponentes.

La pandemia, desafortunadamente, se llevó a uno de los máximos ídolos del indoor soccer en México: Geraldo Francisco Dos Santos.

Ziza falleció el 29 de junio de este año víctima del COVID-19, pero sin duda que su legado en el sintético será eterno.

Poseedor de un demoledor disparo y una contagiante alegría para jugar, el padre de los mundialistas mexicanos Giovani y Jonathan Dos Santos, plasmó una huella indeleble entre los amantes del futbol rápido.

Sumó 386 puntos en 172 partidos, producto de 250 goles y 136 asistencias, jugando principalmente para La Raza de Monterrey, escuadra con la que disputó cinco temporadas, de 1993 a 1996 y la 1999. Previamente jugó un torneo en 1986-1987 con Los Angeles Lazer.

Fue pieza fundamental en el bicampeonato del mexicano que dirigió Erich Geyer en las temporadas 1995 y 1996 de la CISL.

Solo entre 1994 y 1995 anotó 114 goles y colocó 67 asistencias, una etapa demoledora para el numero 9 de La Raza.

Me tocó verlo muchísimos partidos en el Gimnasio del Tec, y era un verdadero espectáculo. Hacía ver muy fácil el acomodarse y sacar el disparo. Su baile de samba tras anotar fue su sello característico que enamoró a los fans mexicanos.

”Era alguien que querías tener en tu equipo siempre y no de contrario”, dice Alejandro Cárdenas, su compañero en LaRaza, “era muy técnico, explosivo en espacio corto, de espaldas al marco era letal porque no le podías quitar el balón”.

“Cardy”, el capitán de ese mítico equipo de La Raza, quien además jugó en San Diego y es padre de Mitchell Cárdenas, defensor de los Sockers, también destaca la alegría de Zizinho para jugar y fuera del terreno de juego. “Tenía un carisma espectacular”.

En una ciudad en la que el soccer es el amo y señor entre el gusto de los aficionados, Zizinho junto a “Chikis” López, Genoni Martínez, Cárdenas, Marco Coria, Raúl Salas, y Martín Hernández, entre otros, pusieron al indoor en la baraja de opciones entre los deportes profesionales de Monterrey.

Recientemente el Flash de Monterrey le rindió un merecido homenaje por el gran legado que dejó en el sintético.

Su partida dejó una estela de tristeza en Monterrey, pero sin duda será recordado por su eterna alegría y contundencia.